Descubre la cultura vinícola de la zona del Bages. Podrás conocer el patrimonio rural de las tinas de piedra seca. Se trata de una estructures únicas en Cataluña y sorprenden por su arquitectura y estado de conservación. Estas están dispuestas en pequeños grupos donde los payeses de la zona metían las uvas para prensarlas y depositarlas posteriormente en tinas situadas a un nivel inferior por su fermentación.
Artés se convertirá también en un punto de parada obligatoria. En este pequeño pueblo, de claros orígenes vinícolas, se pueden visitar distintas bodegas, que crean vinos que contienen una variedad autóctona, el picapoll, muy tradicional en esta zona del Pla de Bages, que es denominación de origen.
La última parada que te proponemos en l’Estany, pequeño pueblo que alberga un monasterio fundado en el año 1080, y donde destaca su claustro, una de las joyas del románico catalán. El estanque, de aquí el nombre del pueblo, ya no está, pero se pueden encontrar testimonios asociados a su historia: la mina, gran obra de ingeniería que facilitó el secado del estanque, y los canales, que aún cumplen su deber de canalizar las aguas hacia la mina.
Tinas en la región del Bages
Los Tres Saltos del Llobregat, al Bages
Enoturismo en el Pla de Bages
©Òscar Rodbag
