El Camino Oliba es una ruta rodeada de patrimonio cultural y natural. Desde Montserrat (monasterio, montaña y parque natural) hasta las privilegiadas Basses de Puigsec (mirador del Canigó), este sendero de gran recorrido transcurre por conreos de viñedos, pastos, bosques y núcleos rurales. Cruza las ciudades de Manresa, Vic y Ripoll; por pueblos con interés patrimonial como Sant Joan de les Abadesses, Rupit, Tavertet y Camprodon o por pequeños pueblos y masías rodeados por un paisaje singular.
Los caminos y senderos que encadena esta ruta forman parte, por si mismos, del patrimonio inmaterial de Cataluña: desde tiempos inmemoriales, esta ha sido la infraestructura que ha mantenido el contacto entre pueblos y masías de esta zona que hoy en día se presta a la descubierta del viajero.